GOLDEN APES: Malvs (AF Music 2016)

Tras un receso de algunos años tras la edición de su último álbum en estudio con nuevos temas, el aclamado “Riot”, y el semi-acústico recopilatorio “The langsyne letanies”, por fin tenemos entre manos lo nuevo de los berlineses Golden Apes.

La verdad es que lo tenían difícil después de su último disco, donde habían puesto el listón realmente alto. La reafirmación de “Malvs”, no me hace más que pensar que no han hecho más que mejorar durante este tiempo, dejándonos un disco sin desperdicio ni relleno.

Para ser más exactos, “Malvs” es un viaje por los últimos veinte años de bandas de gótico y dark wave, en su forma más ortodoxa.

Ya el año pasado nos adelantaron “Verity”, que pudimos disfrutar en primicia en la última edición del Dark Spring festival en Berlín. Sinceramente, la cosa prometía con ese temas de puro rock gótico enérgico y con unas guitarras a cargo de Dirk que quitaban el hipo. Era un auténtico himno de los que no dejan de sonar en décadas, así que, ha sido realmente satisfactorio comprobar que el resto del disco está más que a la altura.

 

Tras una evocadora y a la par que simple portada, se guardan bajo llave digital 13 trallazos de lo que, con total seguridad, será uno de los discos de cabecera de 2017.

Desde la fuerza de “Verity”, “Grinding mills” o “Malady”, hasta el que bien podría ser un himno compuesto por los Cure para “Disintegration”, “Missing”.

Precisamente, lo mejor de este disco es que no han abandonado ninguna de sus influencias clásicas desde el comienzo de su carrera, véase unos Chameleons, Cure, Bowie, AATT…sino que encima tienen la capacidad de sonar más modernos que nadie, con un sonido actual y dinámico, todo ello orquestado y dirigido por la sugerente voz del carismático Peer Lebretch (ex- Dust of Basement), el cual se luce muy bien en temas como “Sermon in the Vale”, cuya melodía inicial me recuerda mucho , no sé porqué, a una canción de Bowie sobre pegar fuego con gasolina y personas con cabeza de gato.

Lo dicho, un disco que por suerte se deja escuchar fácilmente de principio a fin sin tener tentaciones de darle al pause o cambiar de tercio.

Este año tendremos la posibilidad de poder comprobar la veracidad de los temas en directo, en una nueva edición del Dark Spring, donde tocan cada año. Ya os contaré con más detalle.

De momento, aquí tenéis una excelente banda sonora para las tardes de invierno, para escuchar y dejar volar la mente hacia otros escenarios lejanos donde los anhelos de los seres humanos no caminan con pies de realidad.

 

Espíritu