AVANT-GARDE: Antitesi (Manic Depression 2013)

Tengo que empezar reconociendo mi absoluta debilidad por los grupos siniestros que cantan en italiano. Prácticamente me hacen renunciar a toda objetividad y me obligan a rendirme sin más a sus pies, postrado, ante el deje, finísimo deje, de allende los Apeninos. Desconozco la razón y si bien es cierto que hay bandas de aquel país que no me gustan nada, el hecho de cantar en italiano me hace tenerlos un cariño especial. Si además, como en este caso, se esfuerzan por dotar las canciones de personalidad, por hacerlas propias, por huir de estereotipos, con más razón. Me explico. Avant-Garde se formaron en Roma a mediados de los 90, no son precisamente unos recién llegados. Desde el principio, desde aquel primer EP homónimo de 1999, han venido demostrando hasta que punto han asimilado toda la música oscura que ha ido entrando por sus oídos. Mezclando gótico puro y clásico con darkwave resultona, añadiendo aquí y allá dramatismo siniestro, elegancia afterpunk, un punto (o dos) de locura deathrockera… hasta obtener una amalgama de padres más que conocidos pero de resultado original y particular, emocionantemente propio. Tras cuatro epés y dos cedeses han publicado este año, con el sello francés Manic Depression su tercer largo: Antitesi. En él desarrollan un poco más el sonido que antes comentaba; no se han quedado en lo ya hecho sino que han añadido el resultado de todos estos años de evolución, lo que indiscutiblemente es otro punto a su favor. Y además, cantan en italiano.

Antitesi abre con Dove Solo Tu Vorrai, clásica como el buen whisky, seca, oscura, épica. Con todos los ingredientes que cualquier pieza oscura que se precie ha de tener, con todos ellos en su sitio, además, que es menos habitual. Disincanto es de ritmo más rápido, esencia darkwave para otro tema que sin abandonar lo canónico, se desarrolla un poco más allá. La importancia de no perder la referencia, el oremus, por más que se mire hacia adelante. O lo contrario, la importancia clave de saber mirar al futuro sin despreciar lo anterior. ¿Paradojas? No tanto, si lo piensas. Epoque acelera más aún el ritmo. Casi deathrock, de la vieja escuela. Desgarro, guitarras afiladísimas, también suena actual pese a lo dicho, vigente, más que vigente. I Due Labirinte es un tema extraño y especial: con letra de Borges (Jorge Luis, no el de las nueces), narrada más que cantada por Mushy (Valentina Fanigliulo). Un tema diferente, curiosamente pegadizo, casi hipnótico… un acierto, vamos. Con Nubi Altrove vuelve rabiosa la darkwave noventera. El protagonismo es a ratos del teclado, pero sin renunciar al abrigo de los bajos y las guitarras, como debe ser, como era en el 94. Las influencias, queda demostrado, no son en vano. Nunca lo fueron. Livido Livore también es distinta, pero en otro sentido. Con ritmo como de vals (no lo es, ya me entendeis), en oscuro por supuesto, para mí es el mejor tema del disco (dentro de una nota media bastante alta). Elegante, preciosa. Añeja y moderna al mismo tiempo. Tremendamente adictiva. Il Buio Su Roma es una canción que retoma el gótico clásico, murcielagoso. Decadente, preciosista, romántico… Está más o menos en la misma línea que la que da nombre al CD (y cierra la edición como tal, aunque luego aparecen dos bonus que comentaremos), Antitesi. Guitarras, teclados, todo lo necesario para conformar temas de los de cardados y chorreras. Antitesi es instrumental pero poco importa, nada cambia, es el mismo sentimiento. Los dos bonus track que comentaba antes, precedidas por unos segundo de silencio, son sendas versiones de Livido Livore (Night Version en este caso) y la propia Antitesi (Weird Mix en este otro). Cambian poco las originales, algo ralentizadas, con otro aire pero lo bastante parecidas a las primeras (las prefiero, me suenan más naturales). Bueno, las típicas recreaciones que suponen otro punto de vista, cercano aunque distinto.

En definitiva, Antitesi es el disco que todo aficionado al palo querría hacer o escuchar. Bien producido, lleno de sentimiento siniestro, talentosamente tocado y compuesto. Ocho temas que se hacen cortos, lo que siempre es bueno. Ocho canciones que harán (deberían hacer al menos) las delicias de todos los lectores de estas páginas, porque Avant-Garde son bastante buenos. Y además, cantan en italiano…