Marzo de 2010:
Lib I. Noviembre de 2012 Goetia IV. En medio
Hypogeum II,
Xibalba III y los tres EPs, The Body Of Light,
Ancient Astronauts, y
Genesis Revealed. Y también Infinite Visions y The Gathering. Es decir, en treinta y dos meses, cuatro discos, tres Ep’s, un disco en directo y un dvd + cd. Y en febrero el quinto “largo”, Goetia V. Usease una nueva producción cada tres meses y medio. Impresiona verlo escrito, al menos a mí. Pero impresiona más cuando los escuchas y te das cuenta de que lo prolífico no tiene porque estar reñido con la calidad. Comentaba el otro día con un amigo que con Merciful Nuns hay mucha gente que no profundiza nada. Se quedan en la imagen o en el sonido heredero del Sisters-Fields. Sin embargo, detrás hay un grupazo. Y claro, me diréis que por qué en este caso sí hay que profundizar, cuando yo mismo tantas veces he criticado eso mismo en otros grupos (el ser calcos de los citados). Pues, mentecatos, porque en este caso hay muchísimo dónde bucear detrás y quedarse en lo superficial, aparte de idiota, es perderse demasiado.
No me refiero solo al tema letras, a lo esotérico, a la búsqueda del mito primigenio, a las teorías (a veces delirantes, otras fascinantes) de extraterrestres prehistóricos, etc, que también. Me refiero a profundidad en lo musical. Al no quedarse en una supuesta semejanza (que existe) en ritmos y/o formas de cantar. Al darse cuenta de que detrás de ese montonazo de canciones hay metidas muchas horas de trabajo tanto compositivo como de interpretación. Pero, por descontado, no pido atención para Merciful Nuns por solidaridad de clase obrera. No digo que los escuches porque “trabajen mucho”. Lo digo porque si profundizas, te das cuenta de la tonelada de talento que hay detrás y de que esas horas invertidas (sin duda) en CREAR son horas de disfrute absoluto para el escuchante, a poco que esté atento.
¿Qué aporta Goetia IV? Pues nada que no hubiera sido aportado ya antes. Lo mismo que puedes encontrar en cualquiera de los trabajos anteriores, en forma de ocho canciones nuevas. Rock gótico, con todo lo que eso significa. Bien hecho además, por supuesto. ¿Entonces es más de lo mismo? Pues sí, pero no. Siguen las guitarras en una forma espléndida, sigue la profusión de ritmos, las voces heladas, profundas y oscuras, la densidad de los bajos y los medios tiempos fríos y desoladores. Siguen los ramalazos de puro rock (los dos adelantos, The Nazarene y Temple At The Dome Of The Rock son buena muestra de ello) y siguen los temas más ambientales, casi sicodélicos (Love Will Be Purified, en sus trece minutos y pico, es un buen ejemplo de esto). Pero también es una vuelta de tuerca a un estilo que perfectamente –con la cantidad de discos que sacan y con los referentes citados- podría haberse enquistado y limitarse el grupo a repetir y perpetuar esquemas trillados hasta la náusea. Pero no, no es así. Los últimos viajes de Mr. Seth se hacen notar, sobre todo en la preponderancia de temas babilónicos-judaicos-palestinos, o sea, todo lo que refleja toda esa zona. Que es mucho, desde luego, desde cualquier punto de vista. En las letras, en los títulos, en la estética… Salomón, etcétera. Y también en la música se aprecia una cierta evolución, dentro de lo canónico. Goetia IV no es Lib. I, es el perfeccionamiento de este. Es más fuerte, más rápido, más oscuro. Más denso. Mejor. Una especie de Citius, Altius, Fortius, pero en gótico. Debería ser suficiente.