GHOULTOWN: Ghost of the Southern Son (Angry Planet 2017)

Casi 10 años han pasado desde que Ghoultown publicase su último trabajo de estudio, sin contar The Unforgotten: Rare & Un-Released (2012), Life After Sundown (2008). 8 años desde que pudiese disfrutar de su directo en el WaveGotikTreffen (2010)… Y, por fin, publican su quinto álbum.

 

A pesar de que su obra cumbre sea el Life After Sundown y de que su salto de calidad se produjese en 2006 con su Bury Them Deep, este nuevo trabajo no tiene mucho que envidiar a los mencionados, excepto por algún detalle que pasaremos a explicar.

La evolución de Ghoultown ha sido un tanto curiosa. Proceder de grupos de la escena cuasiheavy o doom como Solitude Aeturnus y The Killcreeps (cosa que se puede apreciar con bastante claridad en las composiciones de Count Lyle, principal componente de la banda) y evolucionar a una de las formaciones fundacionales del gothabilly es algo que a los tejanos no se les puede negar. Aunque el endurecimiento de la guitarra se puede apreciar en estos últimos trabajos, ya que los primeros discos se notaban más fronterizos, más sureños, iniciadores de un movimiento inexistente y que estaba por crear, y del que sin ser los únicos abanderados, por supuesto, sí son, creo, de los que más altas cifras de popularidad han conseguido y que todavía siguen en activo sacando discos y dando conciertos, aunque fuera de las fronteras de Texas es difícil verlos (este año darán un par de conciertos en Inglaterra). Dónde están Shadow Reichenstein o mis adorados Cult Of The Psychic Fetus…

Nacido Robert Lyle Steadham, como escritor Lyle Blackburn y como músico Count Lyle (desconozco si tiene alguno como criptozoólogo), él es el alma máter de la banda desde los inicios, a Ghoultown creo que nadie le negará la “originalidad”, si se puede utilizar este término en música.

El problema de este nuevo disco es la inexistencia de canciones que sobresalgan del resto como ocurrió en trabajos anteriores. Sin desmerecer en calidad, es verdad que echas en falta algún tema que se te quede en la cabeza y repitas hasta la saciedad…

Inicia este Ghost of the Southern Son con una intro, “Apparition”, para dar comienzo con uno de los temas más significativos del disco “Southern Son”. Combinación de todos los elementos típicos de las composiciones de la banda. Guitarra, voz profunda, trompeta. Y acordes acelerados para comenzar con buen pie.

“Ghost of the Past” continúa la línea de la anterior, aunque con ritmo más monótono.

“Devil’s Comin Round” es la que más me recuerda a sus primeras composiciones, no tan dura, más fronteriza. La que más me evoca a su mítico “Killer in Texas”.

“Cuchillo” se podría decir que es la que menos me gusta del disco. No sé si por su ritmo pesado a medio tiempo o porque nunca me han entusiasmado las canciones donde meten una palabra en castellano con un acento tan marcado.

Y después de este parón, viene mi parte preferida del trabajo:

“I Am the Night”, “Black on Black”, “Blood, Bullets, and Whiskey”, “Revenge of Dirty Sanchez” y “Stick to Your Guns” es el momento álgido del disco. Ghoultown en estado puro, grandes composiciones al estilo de sus dos grandes trabajos anteriores. Pero, como decía antes, no encuentro todavía una canción a la altura de “Against a Crooked Sky” o “Drink With the Living Dead” o la gran “Walkin Through the Desert (with a crow)”.

Para bajar la intensidad en “Tombstone”. Y terminar con “Vanishing Riders” a modo de epílogo final.

Un gran disco que sin llegar a la altura de sus antecesores, el nivel sigue bastante alto y que imagino que en directo llegará a cotas muy altas.

Por cierto, como siempre, las ilustraciones del álbum son, de nuevo, fantásticas, obra de Dan Brereton.

 

Ijzys Dawn