GHOULTOWN: The Unforgotten (Rare and Unreleased) (Angry Planet 2012)

Este The Unforgotten no es desde luego el mejor disco para acercarse al particular mundo de los de Texas. Estamos ante una recopilación de demos, rarezas y tomas en directo, por lo que es, sobre todo, un complemento a una estupenda discografía. Veintiuna canciones que de algún modo resumen los trece años de historia del grupo en una edición digital (de momento no habrá edición física, en un futuro, ¿quién sabe?). ¿Por qué razón entonces hablamos de este disco? ¿Qué justifica su compra? Pues en tu caso no lo sé. En el mío, el completar como decía antes una magnífica discografía con un buen puñado de canciones inéditas o prácticamente inéditas; el poder escuchar una y otra vez diferentes versiones de canciones míticas como Killer In Texas, Skeleton Cowboys, Fistful Of Demons, etc, etc. El sonido, además, es bastante bueno, no es el típico disco de rarezas de sonido infame, ni mucho menos.

Son ochenta minutos de puro gothabilly, sea eso lo que fuere. Es decir, ochenta minutos de rock and roll, de aire del Oeste, del polvoriento Oeste, de letras que igual hablan de tequila o de calaveras, de asesinos en serie o de anocheceres en el desierto. Casi una hora y media de ese sonido que siendo equidistante de tantos y tantos sitios, resulta francamente diferente a todo. Sí, las influencias son claras. Sí, no deja de ser guitarra, bajo, batería y voz (con alguna trompeta de cuando en cuando). Sí, amigos, sí. Terror de serie Z y vaqueros malotes. Tan chungo como divertido, claro que sí. Y eso, en estos tiempos terribles de repetición de esquemas más que trillados, en estos momentos en los que encontrar algo original que llevarse a la oreja es tan desazonadoramente difícil, en estos días de copias y más copias y más copias, de ver como la creatividad se confunde o directamente no existe, supone un soplo de aire fresco, algo que trece años después obviamente no sorprende, pero edifica. Ghoultown son todo eso y mucho más. Imposible de poner en palabras, negro sobre blanco (o blanco sobre negro, mismo da). Imposible de describir pero no por eso (o tal vez precisamente por ello) menos importante o destacable. Completemos pues, disfrutemos. Escuchemos y descubramos nuevos matices en canciones que deberían ser de obligada audición. Lógicamente, si te gusta la música, claro.