ASCETIC: Everything Is Becoming (Manic Depression 2015)

12395652_10153716524023898_641022021_nEverything Is Becoming es el nombre del segundo trabajo de Ascetic tras el tremendo Self Initiation de 2013. En esta ocasión es Manic Depression quien lo edita y la verdad es que el trío ha evolucionado bastante su sonido en el poco tiempo transcurrido entre ambos, como ya pudimos constatar en el Festival de la SGM del pasado año. Han oscurecido mucho el sonido en general, le han añadido a casi todas las canciones un tinte bastante más oscuro y opresivo y capas y capas de distorsión para un resultado final más complejo y lleno de matices, más elaborado. Quizá esto no sea del gusto de todos los oyentes pero a mi desde luego, vaya por delante, este Everything Is Becoming me ha encantado.

La base real del sonido del conjunto es parecida: guitarras más o menos furiosas, sonidos electrónicos variados, combinaciones de baterías programadas y percusiones también electrónicas y por supuesto líneas de inmisericorde bajo que estructura y vertebra cada tema. La personal voz de Mr. Skipper hace el resto. Canciones repletas de facetas a descubrir, capas de sonido que desentrañar, letras (y títulos) deliberadamente herméticas que dibujan un CD, en este caso más nunca un conjunto de canciones, como decía oscurísimo y original. De hecho me resulta tremendamente difícil etiquetar el sonido de Ascetic o siquiera referirme a influencias concretas, es de esos grupos que suenan a muchas cosas sin terminar de parecerse a ninguna. Sí que se puede decir, en un afán normalizador, que todos los temas de estos australianos afincados en Berlin son fríos, helados casi. Los nueve que componen este segundo disco suenan a ochentas, a afterpunk clásico, a siniestreo del bueno. Con toques de la Joy, aires a los primeros Swans, detalles de Killing Joke, etc. Pero honestamente el trabajo de Saxon Jörgensen, August Skipper y Andrew Jigalin logra que realmente no se parezcan a ninguno de los citados, más allá de eso, leves (muy muy leves) aromas.

 

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De los nueve temas que como comentaba antes componen este EIB cabría destacar el desgarro oscuro de Utterings, Doomsday for the yeasayers , doomsday will never come. Lenta, pausada, distorsionada, atmosférica; la monotonía rítmica de la desasosegante Exegesis, tal vez la más Swans de todas, tal vez una de las mejores del disco. New needs present themselves, colour bleeds into the cell, you’re receiving the signal, but it’s weak. Letanías siniestras. Voces y guitarras que cortan como el hielo; la engañosa luz de FTO (quizá from the outset?). Desquiciada, épica, ochentera. I’ll join the disillusioned, and disavow reaction, to break the chain that’s moulded; la tristeza infinita de FTF (facing the fall? Feeding the few?) y sus reminiscentes guitarras. It was you all along, an eternal remind, blood poured into form, a shadow you found, and you kept from the others. Afterpunk purísimo, de octanaje elevado, además; el desboque de Synchron, una de mis favoritas. Con el recuerdo de los and also the trees de la primera época al inicio y luego ese desarrollo tan “ascético”. A living space on the shelf, discovers the law of your lies, now all that remains are the thin sheets, that cover your eyes. Una de esas canciones que parecen varias en una sola, una de esas que mutan, cambian y crecen con cada escucha; los ambientes gélidos de Colour. La voz susurrante deslizando angustia sobre la electrónica bien entendida, el sempiterno sonido de la lacerante guitarra, el potente bajo, la base rítmica otra vez helada y heladora… but they can only fail, the systems they prescribe you, when the price of desire, is rising with the tides. Otro gran corte, intimista; lo sintético y lúgubre de la tremenda The Clearing. Una de esas que difícilmente te cansas de escuchar, repetitiva, agobiante, maravillosa. New worlds appearing, wake up, wake up, wake up, dream and memory combined, wake up, wake up, wake up, you call and there’s no answer, but the silence is the voice. Con uno de esos finales punzantes y agudos, de los que llegan adentro, muy adentro; la provocativa calidad de Atheism. De nuevo la distorsión y el ambiente mandan, un corte que tal vez sea el que más recuerda a Self Initiation. Solo tal vez. But your image is persistent, seven days under review, an oasis I imagined, in your arms, in your arms. Clásica en el repertorio, de obligado disfrute; o el potente sonido de History para cerrar el disco. Potente en su simplicidad casi minimalista. Time crawls out from the docks, now all our doubts, lay shattered in the dust, it’s just a sign, to recall, forever just outside your reach, your history. Otra vez una pieza lenta, oscura, fría, conmovedora. Perfecto final.

 

Perfecto final para un Everything Is Becoming que no tiene desperdicio, no hay ningún tema que sea claramente peor que el resto o siquiera menos imprescindible. Un disco que ha terminado por ser de los que más han sonado en los últimos meses en mi equipo de música, uno de esos que no te cansan, no aburren por más veces que suenen. Que todo esté por llegar está por ver. Pero Ascetic son ya una insultante realidad. Y han hecho un disco francamente muy bueno.