THE CULT, 30 de junio de 2007, Sala La Riviera, Madrid
LEYENDA, sí, justo! esa es la puta palabra que me viene a la mente cuando veo cualquier cosa del imaginario The Cult.
Bien!
Llegados a este punto, es de entender que uno se haga expectativas respecto a un concierto EN VIVO (siempre me ha encantado esta voz castellana de decir «live», algo más hortera); Manitú? Como dijo Milans del Bosch: «ese ni está ni se le espera». Toro Sentado? er…
El caso es que, aún a riesgo de haberme equivocado haciéndome muchas pajas mentales desde los 17 años y aun más al descubrir el Rock a partir de los 22, a quien sí se esperaba era a Ian Astbury. No al Rey Lagarto, que ya lo vimos el año pasado, ni al vocalista de Deep Purple sentado en una sillita, sino a Ian, ese (aún a riesgo de parecer Chiquitista) grito de la pradera, esa pasión salvaje del Rock, ese espíritu indomable, esa niña desatada…
Y no: no esperaba saltos, ni filigranas, ni melenaza, ni glamour, ni hostias. Sé qué edad tenéis, amigos (ay! esa edad tan mala…) y eso me importa un cuerno, pero sé que «lo de dentro» si está, sale. Dan igual barrigas, canas, arrugas ni misas…
Prefiero no pensar que «no había ganas esa noche», que entonces me cabreo.
VAMOS A VER: NO fue un concierto horroroso, estuvo bien y tal; Billy Duffy se lo curró bastante, el sonido podía haber sido peor… pero YO TE DIGO, ASTBURY: NO TE ME CONVIERTAS EN LOU REED, porfa!
Fotos: Juan Perez-Fajardo