ROME: Die Æsthetik Der Herrschaftsfreiheit (Trisol 2011)

Uffff. Antes de nada, debo reconocer (de nuevo) que Rome, dentro de su estilo, me parecen con mucho de lo mejor que se puede encontrar hoy día. Incluso en cualquier época y en cualquier estilo. Además son un proyecto inusualmente prolífico e increíblemente cuidadoso en cada uno de sus trabajos, todo cuidado al milímetro. Van a disco por año (con el añadido de singles y EPS) desde el año 2006 y no han dado, todavía aunque espero que nunca, palos de ciego. Por ello, cuando supe de la existencia de este impronunciable Die Æsthetik Der Herrschaftsfreiheit, la duda normal que me habría asaltado con cualquier otro grupo al conocer las dimensiones del mismo, se disipó casi totalmente. Tres discos, treinta y seis canciones (que se dice pronto) en una preciosa y mimada caja con tres libros de cuarenta páginas cada uno. Y encima, en edición limitada y numerada a 999 ejemplares. Repito uffff. ¿Joya para coleccionistas? ¿Recopilatorio para sacar pasta? ¿Suicidio comercial? No, amigos, no. La excelsa obra, otra más, de Mr. Reuter extendida hasta extremos que pocos grupos podrían asumir. Se podría pensar que se hace pesado, tanto disco, tanto tema, tanto libro, pero es que resulta que una de las virtudes de los de Luxemburgo es la variedad dentro de un estilo que fuera de éstos lleva bastante tiempo muy encorsetado. Y es que en este Die Æsthetik Der Herrschaftsfreiheit hay un poco de todo. De todo lo que ya aparecía en Nera o en Nos Chants Perdus (o en cualquier otro disco de esta gente). Es decir, a ratos Dark Folk del de guitarra acústica y voz masculina y seria (pero del bueno), a ratos pop oscuro y melancólico (me sigue recordando en ocasiones a And Also The Trees), a ratos timbales marciales y a ratos algo que podríamos quizá meter en el enorme saco del Dark Ambient. Todo esto consigue que el magno trabajo no se haga nada pesado y se disfrute paladeando cada acorde, cada canción en su medida, sin que aturulle tal despliegue artístico. Destacar canciones es una solemne estupidez, toda vez que incluso me atrevería a afirmar que como mejor se digiere esta especie de tríptico oscuro es todo seguido, sin interrupciones, con una botella de vino (¿Oporto?) como única compañía (y una copa, claro, no vas a beber a morro). Con poca luz, si es “real” (puede servir una chimenea) mejor que mejor. Perro a los pies opcional. En resumen y por no cansar, Die Æsthetik, etc es una compra para mi ineludible y si tienes suerte y puedes hacerte con el pack especial (incluye camiseta, chapitas y postales) todavía mejor.