LA BROMA NEGRA: Suicidarse y Seguir Viviendo (Gaser Discos 2020) por Chatarrera Nórdica

Si hay algo que me gusta más que comer con los dedos desde 2015 es que La Broma Negra saque disco nuevo. Ya comía con los dedos de antes fue cuando los descubrí.

 

Vamos a ponernos en antecedentes: por aquello de ser una fan incondicional y mazo pesada, me gano el privilegio de escuchar la maqueta antes de que salga el disco. Y esta vez no iba a ser menos. Pero claro, esto fue en Diciembre. Y mis orejas cambiaron la percepción de las letras en Marzo y Abril. Y ahora en Julio, no tiene nada que ver en mi cabeza con el disco que escuché al principio. Y tengo que decir que la sensación mola, porque si nos ponemos en modo paranoia, hay hasta predicciones en él. Que es una gilipollez como un piano lo que acabo de decir, pero yo he venido aquí a ser subjetiva.

 

Suicidarse y seguir viviendo es el título del disco, que no lo había dicho aún. En este caso el título sigue significando lo mismo en Diciembre y Julio porque va un poco con mi manera de ser y estilo de vida. La verdad es que a La Broma Negra le salen tan bien los discos como sus títulos, que me resultan apasionantes  (Creo que si me tengo que quedar sólo con uno sería “Joyas de princesas muertas”).

 

Abre el disco Me llamo España y soy alcohólica. Esta canción me hace ilusión especial porque estaba ahí cuando surgió la idea, a raíz de la horterada de letra que le había puesto Marta Sánchez al himno de España. Unas cuantas cervezas ensalzaron el momento risas que nos supuso la desesperada e hizo que terminara en un “pues voy a escribir el nuevo himno de España”. Y aquí lo tenéis. Disfrutadlo, porque nos pega un montón. Y el videoclip es una pasada.

Los Inocentes es un estado de ánimo por el que todos hemos pasado o estamos en él. Mola cuando le ponen a una sensación letra y música, pero de verdad. Es quizás una de las canciones que más claramente tienen conexión con el título del disco, aunque hilando las tienen todas y a mí me encanta hilar. Y el punto de cruz.

 

Mi hermano pequeño me provoca una desazón terrible. Me parece una canción preciosa que me encoge mucho el corazón porque me agobia la letra. Esta es de esas canciones que han cambiado mi percepción sobre ella en estos meses.

No estoy diciendo nada de las melodías pero es que son perfectas acorde con las letras porque nunca falta y sobra nada.

 

1º de Noviembre me flipa. Lo resumiría en esa frase sólo y dejaría que la disfrutarais vírgenes de impresiones. Es que no sé cómo explicar que me gusta porque no es lo que me esperaba. Hay dos canciones en este disco, esta y la que luego señalaré, que me gustan especialmente porque me dan una colleja, y además doble: conociendo como conozco a Carlos Caballero en lo personal, no sé porque me espero que no me vaya a sorprender porque no va a ser lo que yo me espero. O sea, que lo fácil es “la canción se llama 1º de Noviembre, sé que le tira el siniestreo, esto va a ser así” y me da en todo los morros aun a sabiendas que otra cosa no, pero La Broma Negra, antes muerta que sencilla. Pégame más fuerte que me lo merezco.

 

Por mí y por todos mis compañeros encierra a lo bestia una de las cosas que más me gusta de este grupo y es que me haga tirar de enciclopedia para saber por qué nombra a alguna persona en una canción. Pues esta es de orgasmear en ese sentido.

Apóstatas es otra de las canciones que más me gustan del disco. Creo que además fue el primer estribillo que se me pegó durante días. Cañera en letra, música y fondo, me parece un resumen muy bueno de lo que serían no sé, ¿los primeros 50 años de vida de una persona?

 

Pintor de batallas me asusta, directamente, porque es un sueño que tenía de pequeña y que ha venido a mi mente con esta canción con un flashazo tan claro que no sé si es como lo de yo fui a egb y todos hemos comido phoskitos, montado en bici y hemos tenido estos sueños o si es cosa mía.

 

Los pecados de mi padre la asciendo a obra maestra, ea. Me parece una pasada la letra, lo que me transmite (que no sé si es lo mismo que pretende). Me vuelve loca la letra y lo amarga que es.

 

Tengo un ataque de oscuridad es de las que al principio me hizo reír por el título pero luego me resultó igual de desgarradora que muchas en el disco. Ya a estas alturas del disco siento que en cada canción hay un suicidio de momentos, pensamientos, cosas que merecen ir muriendo sin tener que llevarte en conjunto a cortarte las venas.

 

Escarlatina me suena a La Broma Negra de los inicios, me gusta mucho casi ese auto homenaje que probablemente no sea siquiera pero me encanta el resultado que tiene en mi cabeza.

 

No voy a negar que cuando vi que una de las canciones se titulaba Cementerios de España di saltitos de alegría. Es que si hay una letra de una canción con la que me sienta identificada es con esta. Y la entiendo no sé si desde el mismo punto de vista pero ese “hemos dejado de ver y escuchar a nuestros muertos y se nos empiezan a olvidar” me representa tanto que me vuela la cabeza y me hace sonreír. Y lo que más me apasiona es que en realidad no esté hablando de los recintos. Me parece un homenaje precioso.

 

Miserere tiene una de esas frases que de vez en cuando aparecen en una de las canciones que me provocan una ternura infinita por lo que dicen a la vez de lo sencillas que son. Estoy muy enigmática, lo sé, pero quiero que escuchéis el disco todo lo nada influenciados por mis palabras que podáis.

 

Ultimo día en la Tierra acaba con este magnífico disco. Para mi quizás la más oscura de todas, por la letra, la música y porque significa que el disco ya se acaba.

 

 

Cuando acabas de escuchar el disco en conjunto se queda una sensación placentera porque todo cuadra en él. Está relacionado por pequeños hilos que van explicando canciones anteriores o posteriores en el orden. Personalmente yo he sido muy de suicidarme y seguir viviendo en mi forma de actuar en la vida, así que es probable me guste en especial ver que tampoco lo estoy haciendo tan mal si sigo viva. Así, a lo Paulo Coelho punk, La Broma Negra nos invita a descubrir nuevas formas de vivir a través de su música sin necesidad de abrazar árboles que lo único que hace es que aplastéis la tierra porosa que necesitan las raíces para oxigenarse y matarlo.

 

De las ganas de escucharlo en directo ni hablamos.

Chatarrera Nórdica