HORROR VACUI: In Darkness You Will Feel Alright (Legion Of The Dead/Avant 2012)

Lo mejor del deathrock italiano es que tiene la sana costumbre de ir por libre. Lo mejor de ir por libre es que te permite, sin renunciar a identidad alguna, bucear en estilos afines sin que por ello cambies un ápice el objetivo que te plantees. Horror Vacui se permiten este lujo, porque saben y porque pueden. De lo más profundo de un squat, como sus “primos” Belgrado, facturan un afterpunk que de puro furioso entronca con el deathrock más ácido de allende los Apeninos y encima lo hacen sin despeinar una cresta más que lo imprescindible. In Darkness You Will Feel Alright (gran título, tan obvio como acertado, dado de lo que estamos hablando) es un ejemplo de cómo metiendo en la coctelera los palos citados y añadiéndoles unas gotas de rock gótico del de toda la vida y toneladas de entraña, se puede hacer un disco más que apañado.


Horror Vacui no inventan la rueda, ni lo pretenden. Lo suyo va por otro lado. Dejemos de lado experimentos, apartémonos de todo lo que no sea esencial, seminal incluso. Queden las fusiones estilísticas, las influencias diversas, las confluencias de géneros para quien las quiera. Lo de los de Bolonia es más puro, de gusto añejo (buen gusto) y talante decidido. Alguno lo llamará estancarse en el pasado, por glorioso que resulte, otros lo definen como purismo. Yo no lo defino de ningún modo, me limito a deleitarme con ello cuando está bien hecho y, en este caso, lo está. Así, el filo de las guitarras, las contundencias rítmicas, las voces como marcan los cánones y la velocidad en la ejecución, consiguen un objetivo más que digno: divertir al personal. Divertirlo además, sin una pizca de humor. Letras serias y música seria (poco común en este tipo de grupos, reconozcámoslo), de esa que debe hacer pensar. Ahí sí que se nota lo punki, en un clarísimo activismo político en lo lírico. La diversión está en el ritmo bauhausiano que se imprime a cada tema, bailable pero sin excesos febriles. Diez canciones (incluyendo Intro y Outro) más un buen puñado de extras en forma de demos (concretamente seis), componen un CD que sin lugar a dudas ha de ser pieza clave para el aficionado oscuro en este 2012 que en breve nos abandonará (con permiso de los mayas y sus malinterpretadas profecías). Diez canciones entre las que no quiero destacar ninguna: si te gusta una, lo harán todas. Y claro que en la oscuridad se siente uno bien. Damos fe.