ECHO & THE BUNNYMEN, 13 de Noviembre de 2005, Sala Arena, Madrid
La noche empezó con los sevillanos MALAHORA, grupo que hacía venir a la memoria la hornada NOISE POP española de principios de los noventa, pero con una diferencia: ¡¡saben tocar!!, además de tener alguna melodía certera. Prometen.
La sala se fue llenando, mucha camiseta siniestra e incluso algún que otro aspirante a Ian Curtis, hasta que se apagaron las luces quedando solo iluminada por la que desprendía un candelabro de velas rojas; entonces comenzó el viaje en el tiempo.
ECHO AND THE BUNNYMEN realizaron un alucinante recorrido por todos sus temas clásicos: Rescue, Villiers Terrace, All That Jazz, entre los cuales intercalaron algunos de Siberia, su nuevo disco y excusa para esta gira, como Stormy Weather, In The Margins… que no desmerecían para nada frente a los “viejos”.
El sonido fue increíble durante toda la noche, con un Will Sergeant, especialmente pletórico tras su eterno flequillo. Por poner alguna pega la voz de Mac estuvo algo rota y carente de matices, pero todo esto lo suplió con su magnética personalidad (y su típica chulería – interrupción de una versión del Roadhouse Blues de The Doors para enseñar como tocar el riff al guitarra de acompañamiento…). Destacaron especialmente Villiers Terrace, el megaclásico Killing Moon (que Sergeant tocó con una bonita guitarra Phantom) y un impresionante The Cutter que finalizó la actuación.
El primer bis comenzó con Nothing Last Forever, single que supuso su regreso en los noventa, enlazado con una bonita versión de Walk On The Wild Side de Lou Reed. En el segundo bis, destacó la potente Lips Like Sugar, llegó el final con la maravillosa épica de Ocean Rain.
